
Este lunes 21 de marzo, en el Patio de la Infanta se celebró la I Jornada aragonesa dedicada a la humanización en cáncer de mama. Una jornada llena de experiencias y emociones, ponencias y mesas redondas donde personal hospitalario y pacientes compartieron una tarde muy enriquecedora.
La jornada fue inaugurada por la Consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, que destacó que para mejora la humanización en los tratamientos hospitalarios es necesario “ir de la mano sanitarios y pacientes, instituciones y asociaciones”.
A continuación, dieron sus discursos inaugurales; Elena Cuerda como representante institucional de Roche Farma, Patxi García Izuel como representante de la Asociación Española Contra el Cáncer y Antonio Antón, Jefe de Servicio de Oncología Médica del H.U. Miguel Servet.
Seguidamente se disfrutó de una charla magistral por Virginia Ruiz, radioóncologa del Hospital Universitario de Burgos titulada “El cáncer de mama desde un prisma más humano”. En la que destacó la importancia de “promover y formar en empatía compasiva” por ejemplo, con la creación de una figura “Gestora de casos que lleve de la mano a la paciente durante el proceso asistencial, que a veces puede resultar complicado”.
A partir de las 17:00, pudimos sentarnos a escuchar las cuatro mesas de diálogo moderadas por el responsable de comunicación del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón, Juanjo Hernández que nos condujo por unas experiencias de y entre pacientes, como protagonistas, y profesionales, que llegó a emocionar a más de uno entre el público.
Tras la pausa, las ponencias sobre Alimentación, Sexualidad, Compatibilización de la vida laboral y Psicooncología, nos explicaron detalles de la vida de las pacientes que la sociedad suele dejar de lado una vez se tiene el diagnóstico humanizando y acercando la realidad existente al público.
Para cerrar y concluir estas ponencias, se llegaron a unas conclusiones por parte de las profesionales del Hospital Universitario Miguel Servet Reyes Ibañez y Carmen Casamayor; se clausuró el acto de forma oficial a manos de José María Arnal, Gerente del Servicio Aragonés de Salud, y, como cierre del la jornada, se pudo disfrutar de la actuación musical de Susana Arregui, paciente y enfermera, con un Nyckelharpa.
Conclusiones: - La crisis sanitaria ha puesto de manifiesto las deficiencias del sistema también en materia de HUMANIZACIÓN. - - Un patrón dietético saludable con alto contenido en alto contenido en frutas, verduras, cereales integrales, aves y pescado y bajo consumo en carne roja, alimentos refinados, dulces y lácteos ricos en grasa podría mejorar el pronóstico general y la supervivencia en las mujeres diagnosticadas de cáncer de mama. - - Humanizar las intervenciones terapéuticas significa ser proactivo en la entrevista médica y no dejar de lado las preocupaciones afectivas e íntimas de la paciente, porque el placer, el amor y la intimidad física favorecen la adherencia al tratamiento y la curación. - - La actitud de las pacientes en el proceso de cáncer de mama es muy importante. Se inicia un camino basado en la confianza, colaboración y con una implicación activa de tal forma que la comunicación del diagnóstico se sustente en un lenguaje adecuado y adaptado y apoyado en la biología molecular tumoral que nos proporcionan los patólogos para trabajar desde una medicina personalizada. - - La toma de decisiones compartidas debe marcar nuestra actuación en consultas. El cirujano debe ceder “el control clásico” en favor de la paciente que debe convertirse en un elemento activo y corresponsable de su proceso. La atención de la paciente debe ser global y afecta a otros aspectos más allá de la cirugía. - - El miedo es uno de los sentimientos más frecuentes e intensos que experimentan los pacientes que reciben un diagnóstico de cáncer (de mama). La situación de pandemia que todavía padecemos a día de hoy no ha hecho sino acrecentarlo. Es esencial que todo el equipo sanitario sea consciente de ello para poder proporcionar un trato empático y tranquilizador. - - La recaída de la enfermedad es un momento difícil dónde se hace más necesaria que nunca, la comunicación veraz y afectuosa. Cobran especial importancia las redes de soporte social, así como la orientación acerca de cómo los pacientes pueden contribuir a mejorar su pronóstico y su vida: aspectos como la nutrición, el ejercicio físico, el apoyo psicológico. - - Combinar ciencia y corazón, es decir, terapia efectiva y afectiva. Para visualizar la jornada puedes verla en este enlace: